Política de cancelación de citas
Todos nuestros clientes entienden y aceptan las condiciones que a continuación se exponen, a partir del momento en el que se les confirma su cita con fecha y hora por cualquiera de las siguientes vías:
- Esta página web
- E-mail, mensaje de texto, o WhatsApp
- Vía oral: telefónicamente o en la misma consulta al consensuar la siguiente sesión.
Los cambios de cita o cancelaciones avisadas con más de 24 horas de antelación, no tendrán ningún perjuicio económico para nuestros clientes, aunque agradeceremos que se haga con el mayor tiempo posible para que podamos llamar a alguien de la lista de espera.
Las cancelaciones que no se avisen en menos de 24 h. por cualquiera de las vías mencionadas deberán ser abonadas en su totalidad.
- En el caso de cita no abonada con antelación, facilitaremos número de cuenta para realizar transferencia bancaria.
- En el caso de los bonos ya pagados, dicha sesión se dará como perdida. Como el número de sesiones de dicho bono, son las mínimas imprescindibles para que el tratamiento se desarrolle adecuadamente y no deseamos que haya perjuicio en el resultado final del tratamiento, aconsejaremos recuperarla asistiendo y abonando una sesión suelta aparte.
Tan sólo no se aplicarán estas condiciones, si existe alguna causa de fuerza mayor, accidente o enfermedad grave o urgente que no permita avisar con esas 24 horas de antelación que solicitamos, siempre y cuando sean justificadas por escrito de organismos oficiales, o demostrables por su casuística concreta. No siendo válidos los motivos como por ejemplo, no encontrar la localización de la consulta, cambios repentinos o imprevistos laborales o personales que no se pueda demostrar su inevitabilidad, así como olvidos o descuidos en los que se ha hecho caso omiso a los recordatorios.
Gracias por tu comprensión y sentido común.
El equipo de FiSinergia.
¿Por qué esta política?
Trabajamos por darles la mejor atención posible. Somos serias y respetuosas con nuestros clientes y su tiempo, y deseamos ser correspondidas de la misma manera.
Normalmente no es así, pero hay algunas ocasiones en las que no nos hemos sentido cuidadas, así que nos reunimos todo el equipo para buscar una solución y llegamos a la siguiente conclusión: Necesitamos una política de cancelaciones en la que nos cercioramos de que nos aviséis cuando no podáis acudir. Sólo eso, es así de simple.
Cuando reservamos una habitación en un hotel y en el último momento decidimos no dormir allí, ¿lo tenemos que pagar? Cuando compramos un billete de avión y no cogemos el vuelo por no estar en la puerta de embarque , ¿nos lo cobran? Y cuando tenemos entradas para el cine o el teatro y decidimos no acudir, ¿acaso nos devuelven el importe de la compra?
La realidad es que si reservamos cualquiera de estos servicios y, a última hora, decidimos no disfrutar de ellos, todo el mundo entiende que se nos cobren.
Sin embargo, no ocurre lo mismo cuando, en el último momento, un paciente decide no acudir a la cita con su fisioterapeuta. Algo difícil de aceptar para nosotras ya que, cuando alguien confirma una consulta, no solo está reservando nuestras manos sino también nuestro tiempo y nuestra disponibilidad para otros pacientes.
Tristemente, nos ha ocurrido más de una vez que nos quedamos esperando sin que nos hayan avisado, o dicho aviso es solo unos minutos antes y recibimos un escueto mensaje que dice: “ay!, lo siento, no puedo ir por motivos personales. Ya os llamaré de nuevo” quedándonos bastante impotentes en estas situaciones.
Así que esta política NO es para molestarle, ni pretendemos cobrarle sin trabajar. Sólo queremos CUIDAR a nuestros profesionales y que nos avises si no vas a venir. Y por supuesto, si tiene algún imprevisto de última hora (igual que podemos tenerlo nosotras) o una embarazada se pone de parto, o pasa cualquier cosa inevitable…, sólo pedimos amablemente que nos lo justifiquen y sean formales y honestos con nosotras.